Mondo Duplantis rompe récord en Paris 2024
La noche del 5 de agosto de 2024 será recordada como un punto culminante en la historia del deporte y de cómo tanto la tecnología como el talento humano pueden combinarse para alcanzar nuevas alturas.
Cortesía: Paris 2024.
El mundo del atletismo fue testigo de un momento histórico en los Juegos Olímpicos de París 2024 cuando Armand ‘Mondo’ Duplantis superó nuevamente los límites de la pértiga. Con sólo 24 años, Duplantis logró un salto impresionante de 6.25 metros, rompiendo su propio récord mundial y asegurando su novena marca histórica en esta disciplina. Mientras el público del Stade de France aclamaba a Duplantis con gritos de "Mondo, Mondo, Mondo", quedaba claro que estaban presenciando no sólo un momento de grandeza atlética, sino también un testimonio del poder de la innovación.
La pértiga actual utiliza fibra de carbono
Cortesía: Paris 2024.
Desde su inclusión en los Juegos Olímpicos modernos en 1896, el salto con pértiga ha visto una transformación significativa en los materiales utilizados. Originalmente, las pértigas estaban hechas de madera o bambú, lo que permitía a los atletas alcanzar alturas de hasta 4.5 metros. Sin embargo, el avance en los materiales ha llevado a la adopción de fibra de vidrio y, más recientemente, fibra de carbono, revolucionando la disciplina.
La fibra de carbono, un material sintético compuesto por finos filamentos de carbono, ha permitido a los saltadores alcanzar alturas inimaginables hace décadas. Jeff Hartwig fue uno de los pioneros en utilizar pértigas de fibra de carbono, superando la barrera de los 6 metros. Este material es ligero y tiene una alta resistencia al impacto, proporcionando un retorno de energía óptimo que permite a los atletas alcanzar mayores alturas con menos esfuerzo.
Cortesía: Mercedes-Benz Group.
El récord de Duplantis en París 2024, por su parte, simboliza la continua evolución del deporte gracias a los avances tecnológicos. La fibra de carbono ha demostrado ser un material esencial tanto en el atletismo como en el automovilismo, y su desarrollo continuo promete seguir impulsando los límites de lo que es posible. Este material no sólo ha transformado el salto con pértiga, sino que también juega un papel crucial en el automovilismo. Desde principios de los años 80, este material ha sido fundamental en la construcción de los chasis de los monoplazas, comenzando con el McLaren MP4/1 diseñado por John Barnard. Este cambio marcó una nueva era en la seguridad y el rendimiento de los autos de Formula 1.
La similitud entre el uso de la fibra de carbono en el salto con pértiga y en la Formula 1 radica en su capacidad para ser ligero y extremadamente resistente. En ambos casos, el material permite una mayor velocidad y un rendimiento superior. En el salto con pértiga, la ligereza de la pértiga permite a los atletas correr más rápido hacia el salto, mientras que su resistencia asegura un mayor retorno de energía al flexionarse y volver a su forma original. En el automovilismo, el chasis de fibra de carbono proporciona una estructura segura y ligera que puede soportar impactos significativos, protegiendo al piloto y mejorando la velocidad y maniobrabilidad del coche.
