La victoria Porsche en Qatar 1812 km
En una carrera que puso a prueba los límites de resistencia y estrategia, Porsche emergió como el indiscutible campeón en la era inaugural de los hypercars en las carreras de resistencia.
Qatar 1812km marcó el inicio del Campeonato Mundial de Resistencia de la FIA y Porsche estelarizó el fin de semana. Al volante del formidable Porsche 963, Kévin Estre plasmó su nombre a lo grande en la historia del automovilismo al cruzar primero la línea de meta, asegurando la primera victoria de la firma en esta nueva era. Junto a sus talentosos compañeros de equipo André Lotterer y Laurens Vanthoor, Estre navegó magistralmente por las curvas del circuito de Lusail, liderando el pelotón durante la mayoría de las extenuantes 10 horas de carrera.
Sin embargo, la victoria no llegó sin sus desafíos. En las etapas finales de la carrera, un encuentro lleno de tensión con el auto número 67 Akkodis ASP Lexus RC F dejó al 963 con daños en su sidepod y paneles vitales. Mostrando la resiliencia sinónimo de Porsche, el equipo ejecutó rápidamente reparaciones con apenas minutos restantes, asegurando su lugar en lo más alto del podio. Mientras el equipo celebraba su triunfo, la carrera tuvo sus propias vueltas y sorpresas. El 93 Peugeot 9X8, listo para un final fuerte y un potencial segundo lugar, encontró problemas tardíos, relegándolo a un séptimo lugar luchado con firmeza. Este contratiempo abrió paso para que el 12 Hertz Team JOTA y la entrada 5 de Porsche Penske lucharan por posiciones en el podio, asegurando finalmente el segundo y tercer lugar, respectivamente.
Los esfuerzos colectivos de Will Stevens, Callum Ilott, Norman Nato, Matt Campbell, Michael Christensen y Frederic Makowiecki impulsaron a Porsche a un destacado final de 1-2-3, consolidando su dominio en la categoría de hypercars. En medio de la feroz competencia, la entrada de Cadillac Racing protagonizó una notable remontada, superando contratiempos iniciales para asegurar un cuarto lugar digno de elogio. Mientras tanto, el 83 AF Corse Ferrari 499P, pilotado por el talentoso trío de Robert Kubica, Robert Shwartzman y Yifei Ye, mostró su potencial con un quinto lugar en su debut.
Con el polvo asentándose y los aplausos resonando en todo el circuito, Porsche se erigió como un gigante, un testimonio de ingeniería de precisión, determinación inquebrantable y búsqueda de la excelencia. En el mundo de las carreras de resistencia, la primera victoria de la era de los hypercars pertenece al equipo, un triunfo que resonará en los pasillos del automovilismo durante años.